Entre todos los procesos patológicos que afectan a la columna en sus diferentes partes, la osteocondrosis cervical es considerada una de las más comunes. Esta enfermedad conlleva muchas complicaciones, principalmente porque afecta la médula espinal y también afecta negativamente el funcionamiento del cerebro.
Según las estadísticas de 2017, la enfermedad se ha vuelto mucho más joven. Si antes la osteocondrosis afectaba principalmente a personas mayores de 40 años, hoy en día se diagnostican diversas etapas de osteocondrosis cervical en el 90% de las personas mayores de 25 años. Por este motivo, es importante saber todo lo posible sobre la patología, desde qué es hasta los métodos de tratamiento.
¿Qué es la osteocondrosis cervical?
En la práctica médica, la palabra osteocondrosis cervical significa una enfermedad progresiva adquirida que afecta una parte específica de la columna. Este proceso patológico se caracteriza por procesos degenerativos-distróficos en los tejidos de los discos intervertebrales, que son amortiguadores de las vértebras cervicales.
Los cambios degenerativos-distróficos en los discos intervertebrales se deben a que están desgastados y deformados. Como resultado, la distancia entre las vértebras se reduce y como resultado se producen las siguientes consecuencias:
- Estrechamiento del canal espinal en ciertas áreas de la columna.
- Compresión de las arterias vertebrales, grandes vasos sanguíneos que suministran sangre al cerebro. Debido a esto, el suministro al cerebro se deteriora y se altera la circulación sanguínea en la médula espinal cervical.
- Los discos intervertebrales pueden deformarse y aplanarse. Esto conduce a la compresión de ciertas áreas de la médula espinal y los nervios; la mayoría de las veces se produce la compresión de las raíces nerviosas.
Todos estos problemas amenazan no solo con problemas de circulación sanguínea en el cerebro, dolor en el cuello, dolores de cabeza, etc. El desarrollo de osteocondrosis de la columna cervical es peligroso con problemas neurológicos, deterioro del sistema nervioso central y daño al tejido cerebral.
Según la clasificación internacional de enfermedades, a la osteocondrosis de la columna cervical se le asignan varios códigos separados. El código de enfermedad según la CIE 10 depende de la edad a la que se diagnosticó la enfermedad:
- M02 – distrofia de los discos intervertebrales en la adolescencia.
- M42. 12 – proceso degenerativo en la zona del cuello en adultos.
De la edad del paciente y del grado de desarrollo del proceso patológico dependen muchos factores, por ejemplo, las consecuencias, las complicaciones, los síntomas y, por supuesto, los principios del tratamiento.
Causas
El conocimiento de las causas del desarrollo de la osteocondrosis cervical puede desempeñar un papel decisivo en el proceso de diagnóstico, así como en la determinación de los principios de lucha contra la enfermedad.
Sin embargo, antes de enumerar los motivos, cabe decir que los médicos identifican dos factores que conducen al desarrollo de este proceso patológico:
- Patológico: la destrucción de los discos intervertebrales y otras estructuras vertebrales con la participación de tejidos, vasos y haces nerviosos cercanos en el proceso patológico se produce bajo la influencia de factores externos desfavorables. Cuanto más graves son estos factores y otras patologías, más rápido se desarrolla la enfermedad.
- Fisiológico: el desarrollo de la patología se basa principalmente en cambios relacionados con la edad. Hablamos del envejecimiento natural del tejido cartilaginoso de la columna vertebral, depósitos de sal, etc.
Si enumeramos causas más específicas de osteocondrosis cervical, son las siguientes:
- Trastornos de los procesos metabólicos en el cuerpo, así como ciertas etapas de la obesidad.
- La inactividad física es un fenómeno caracterizado por una movilidad limitada. No hablamos sólo de lesiones o enfermedades, esto también incluye el sedentarismo y el trabajo sedentario.
- Patologías del sistema cardiovascular que contribuyen a la alteración de la circulación sanguínea en el cerebro, cambios de presión, etc.
- La postura incorrecta incluye diversas formas de escoliosis, reumatismo e incluso pie plano.
- Lesión de la columna cervical. En este caso hablamos de esguinces, golpes, contusiones. Las lesiones en otras partes de la columna pueden afectar el desarrollo de la osteocondrosis cervical.
- Estrés físico excesivo en la columna cervical, provocado por deportes intensos o dificultades físicas severas, según el tipo de actividad de la persona.
- Un estilo de vida sedentario también es peligroso debido a la tensión constante en la columna cervical y en toda la columna si se sienta incorrectamente o en muebles incómodos.
- Hernia de la columna cervical, así como diversas enfermedades concomitantes.
- Mantener la cabeza forzada durante mucho tiempo en una posición incómoda o antinatural. En este caso, no solo se produce tensión muscular, sino que también se dobla la columna en la región cervical.
- Los médicos consideran que el estrés constante y la tensión nerviosa son una causa muy común.
- También se considera que una de las razones son las anomalías congénitas en la estructura de la columna.
¿Qué riesgos para la salud supone?
Como se mencionó anteriormente, la región de la columna cervical contiene no solo la médula espinal y varias ramas nerviosas, sino también las arterias vertebrales que suministran sangre a la parte occipital del cerebro, el cerebelo y el bulbo raquídeo.
Con el desarrollo de la osteocondrosis cervical, los tejidos cercanos se inflaman. Además, el desarrollo de la patología amenaza con comprimir las raíces nerviosas y apretar los vasos sanguíneos, cuyas consecuencias son las siguientes:
- La osteocondrosis se acompaña de deformidades de la columna, lo que provoca un estrechamiento del canal espinal en determinadas zonas. Esto puede provocar la compresión de la médula espinal y de las ramas nerviosas, lo que promete problemas neurológicos graves. En casos graves, la persona siente dolor e incluso existe la posibilidad de perder el control sobre determinadas partes del cuerpo (principalmente en los brazos o la cara).
- La compresión de los vasos del cuello, como ya se mencionó, se acompaña de una alteración de la circulación en la región occipital del cerebro. En este caso, el cerebro deja de recibir oxígeno y nutrientes en las cantidades necesarias y comienza la falta de oxígeno. Si la circulación sanguínea está alterada, existe un riesgo real de sufrir un accidente cerebrovascular isquémico y diversas patologías neurológicas.
Síndromes
Hablando del peligro que representa la osteocondrosis cervical, a medida que progresa y carece de un tratamiento adecuado, la enfermedad puede provocar una serie de complicaciones y síndromes.
Los principales síndromes son:
- Vertebrales.
- Arteria vertebral.
- Koreshkovy.
- Cardíaco.
Es importante saber que cada uno de estos síntomas va acompañado de sensaciones dolorosas de diferente naturaleza, así como de un sinfín de signos clínicos desfavorables. Una persona puede sentirse mareada, tener tinnitus y mucho más.
síndrome vertebral
Habla de una conexión directa entre la osteocondrosis cervical y los tejidos óseos y cartilaginosos. Los síntomas de este tipo de patología también están asociados al daño a los tejidos mencionados:
- Los movimientos del cuello están parcial o completamente limitados.
- Los movimientos de la cabeza van acompañados de sensaciones dolorosas en la zona del cuello.
- La radiografía muestra cambios morfológicos en los tejidos (cuerpos intervertebrales y vertebrales).
Vale la pena señalar que el síndrome vertebral siempre va acompañado de estos tres signos clínicos. Si falta al menos 1 de ellos, el diagnóstico será completamente diferente.
Síndrome de la arteria vertebral
Este síndrome está causado por un estrechamiento de la arteria vertebral, lo que conlleva problemas vestibulares, vasculares y autonómicos. En este caso, los síntomas principales son extensos:
- Dolores de cabeza y migrañas.
- Discapacidad visual.
- Ruidos en los oídos.
- Mareos frecuentes y mucho más.
El síntoma más peligroso es el desmayo, que indica una falta grave de oxígeno.
síndrome radicular
Ocurre cuando se dañan las raíces de la médula espinal. En este caso, se altera la conducción nerviosa, la persona puede sentir dolor o perder sensibilidad en determinadas partes del cuerpo, o incluso sufrir parálisis.
Dependiendo de en cuál de los 8 pares radiculares se produzca la alteración de la conducción, se identifican los siguientes síntomas:
- 1 par – entumecimiento o dolor en la parte posterior de la cabeza;
- 3er par: alteración del reflejo de masticación, entumecimiento de la lengua y sensaciones desagradables detrás de las orejas;
- 4 pares: dolor en la clavícula, alteración del reflejo de deglución;
- 5 pares – trastornos de la cintura escapular, acompañados de problemas con el movimiento del brazo;
- Sexto par: el paciente comienza a sentir dolor y entumecimiento en el antebrazo y los omóplatos;
- Séptimo par: las manos y los dedos (generalmente índice y medio) se adormecen;
- 8. º par: problemas similares al punto anterior, pero se siente entumecimiento en el dedo anular y meñique.
Según las características descritas, a veces es posible determinar qué par de raíces se ve afectado por el síndrome radicular.
síndrome cardíaco
A pesar de que el proceso patológico todavía se localiza en la columna cervical, el síndrome tiene todos los signos de patología cardíaca. El cuadro clínico es el siguiente:
- Pulso rápido.
- Dolor en el esternón.
- Dificultad para respirar, debilidad, letargo, disminución del rendimiento.
Grado de desarrollo de la enfermedad.
Cuando hablamos del grado de osteocondrosis de la columna cervical, nos referimos a las etapas de progresión del proceso patológico, que difieren en los signos clínicos. En total, se distinguen cuatro grados de desarrollo de la enfermedad:
- La primera etapa se caracteriza por síntomas vagos. Los pacientes se quejan de dolores de cabeza leves; durante el examen inicial, el médico nota un ligero grado de rigidez muscular.
- El dolor en la columna cervical y la cabeza es más común, más intenso y se irradia al hombro y los brazos. La patología es causada por daño a los discos intervertebrales y pinzamiento de las raíces nerviosas. El dolor se intensifica al girar la cabeza, echarla hacia atrás e inclinarse hacia adelante.
- En la tercera etapa, el dolor es constante, se nota debilidad muscular en los brazos y se forman hernias en los discos intervertebrales. Los movimientos en la zona del cuello son limitados y se presentan mareos frecuentes.
- La cuarta etapa se acompaña de la destrucción completa del disco intervertebral, el tejido cartilaginoso se reemplaza por tejido conectivo. Además del dolor y los mareos, se observan problemas de coordinación y, a menudo, se pellizcan las arterias vertebrales.
Signos y síntomas de osteocondrosis cervical.
Para consultar a un médico de manera oportuna, es necesario comprender claramente los signos de la osteocondrosis cervical. En algunos casos, este conocimiento permite buscar ayuda en las etapas iniciales de la enfermedad, cuando es más fácil de tratar.
En general, los síntomas de la osteocondrosis de la columna cervical son los siguientes:
- El dolor en la osteocondrosis siempre está presente, solo difieren la intensidad y la frecuencia. El dolor es el primer signo clínico. Su intensidad depende de la etapa de progresión de la enfermedad, son de naturaleza sorda o compresiva. Las sensaciones dolorosas están presentes principalmente en el cuello y la región occipital, pero también pueden irradiarse a la región temporal, la cintura escapular y los brazos.
- En la mayoría de los casos, hay manifestaciones de daño al aparato vestibular. Estamos hablando de frecuentes mareos sin causa, náuseas, mala coordinación de movimientos, marcha desigual, pérdida de espacio.
- Uno de los signos clínicos más comunes es la rigidez de los músculos del cuello y la rigidez del movimiento. A una persona le resulta difícil girar, bajar y echar la cabeza hacia atrás, los movimientos van acompañados de ataques de dolor.
- Muchos pacientes informan una sensación de "piel de gallina" en el cuero cabelludo o una sensación de hormigueo característica.
- Se produce debilidad muscular y entumecimiento en el área del brazo.
- A menudo hay manifestaciones psicológicas, expresadas en depresión, somnolencia, cambios bruscos de humor, mal genio o irritabilidad.
- Debido a la mala circulación y al daño al tejido cerebral, los mareos se intensifican y aparecen ruidos en los oídos, similares a crujidos, pulsaciones y zumbidos.
- La mayoría de los pacientes notan un deterioro de la visión, así como dolor en los globos oculares, especialmente cuando intentan entrecerrar demasiado los ojos hacia la izquierda, derecha, arriba o abajo.
A veces es posible determinar el grado de desarrollo del proceso patológico mediante los síntomas. Sin embargo, para un diagnóstico completo esto todavía no es suficiente y se requieren una serie de medidas diagnósticas.
Métodos de diagnóstico
El diagnóstico de osteocondrosis cervical es necesario para determinar la ubicación y la etapa de progresión de la enfermedad. Para un diagnóstico completo, se necesitan los siguientes métodos de diagnóstico:
- La radiografía es el método principal para determinar el grado y la ubicación de la deformidad de la columna vertebral.
- La tomografía computarizada se puede utilizar para diagnosticar con mayor precisión cambios patológicos en las vértebras y los discos intervertebrales.
- MRI (resonancia magnética): permite examinar en detalle los discos y las vértebras, determinar la presencia de hernias, protuberancias, la extensión de las lesiones, etc.
- Dopplerografía: con este examen es posible encontrar el lugar de compresión de la arteria y evaluar el grado de trastornos circulatorios.
Métodos de tratamiento
El tratamiento de la osteocondrosis del cuello implica siempre un enfoque integrado. Los principios del tratamiento dependen de muchos factores, como la edad del paciente, el estadio de desarrollo de la enfermedad, la gravedad del cuadro clínico, etc.
Sin embargo, en esta situación no puede prescindir de un médico y, en primer lugar, puede ponerse en contacto con un médico de cabecera, que luego le derivará a un vertebrólogo.
En cuanto al enfoque integrado: la osteocondrosis de la columna cervical se trata con la ayuda de terapia con medicamentos, fisioterapia, masajes, fisioterapia y otros métodos, de los que vale la pena hablar con más detalle.
Tratamiento farmacológico
La base para el tratamiento de la osteocondrosis cervical es la terapia con medicamentos, que implica el uso de tabletas, fármacos y medicamentos de los siguientes grupos:
- Analgésicos: analgésicos y antiespasmódicos. Los primeros embotan directamente los centros nerviosos, aliviando así las sensaciones dolorosas. Estos últimos le permiten aliviar los espasmos de los músculos del cuello, mejorando el flujo sanguíneo y suprimiendo el dolor.
- AINE: los medicamentos antiinflamatorios no esteroides son necesarios para reducir la inflamación y la mayoría de ellos también eliminan el dolor. A menudo, estos medicamentos se utilizan en forma de geles o ungüentos que se frotan en el área afectada.
- Los relajantes musculares son otra forma de aliviar los espasmos musculares en la región cervical.
- Los condroprotectores son obligatorios en determinadas etapas de la osteocondrosis de la columna porque contribuyen a la restauración del tejido óseo.
- Vitaminas B: normalizan los procesos metabólicos del tejido nervioso, mejoran la conductividad de los impulsos nerviosos y promueven el funcionamiento del sistema nervioso central.
Recuerde, el tratamiento sólo debe realizarse bajo la supervisión de un médico, quien es el responsable de prescribir cada medicamento, así como de determinar la duración de su uso y dosificación.
Fisioterapia
El tratamiento de la osteocondrosis del cuello será muchas veces más eficaz utilizando determinadas técnicas de fisioterapia:
- Electroforesis.
- Terapia con láser.
- Ultrasonido.
- Masaje.
La terapia de masaje debe ser realizada por un profesional médico experimentado, el tratamiento se lleva a cabo en un curso de al menos 10 sesiones. Los masajes cervicales ayudan a normalizar la circulación sanguínea, recuperar la elasticidad, el tono muscular, aliviar el dolor, etc.
Fisioterapia
Los ejercicios terapéuticos también ayudan a acelerar la recuperación, pero se realizan únicamente durante las etapas de recuperación. Es importante que los ejercicios no provoquen molestias ni dolor al paciente. La terapia con ejercicios tiene como objetivo fortalecer los músculos y aliviar las molestias durante los movimientos aumentando la elasticidad de las fibras musculares.
La técnica del ejercicio la desarrolla inicialmente un fisioterapeuta, luego el paciente puede realizar gimnasia de forma independiente en casa.
Terapia manual
La terapia manual se basa en el principio de restaurar las funciones motoras y la movilidad entre las vértebras. Inicialmente, las manipulaciones consisten en un ligero masaje relajante, luego el médico aplica cada vez más fuerza, aplicando presión y girando el cuello hacia las vértebras.
Aplicador Kuznetsov
El uso de aplicadores Kuznetsov es uno de los métodos para tratar enfermedades de la columna, incluida la osteocondrosis. El efecto del dispositivo sobre la columna cervical normaliza los procesos metabólicos, alivia el dolor, aumenta el tono muscular, mejora la circulación sanguínea, aumenta la conductividad del tejido nervioso, etc.
Tratamiento en casa
Todo el abanico de medidas terapéuticas se realiza en casa, a excepción de la fisioterapia, los masajes (en algunos casos) y las primeras fases de la fisioterapia. Sin embargo, ahora estamos hablando de medicina tradicional y consideraremos algunas de las recetas más efectivas:
- Para usar rábano picante, tome una hoja de esta planta, vierta agua hirviendo sobre ella y aplique el interior en su cuello, asegurándolo con una venda. Se puede dejar mientras duermes para potenciar el efecto.
- Si no existen contraindicaciones por parte del médico, un buen remedio sería calentar la columna cervical. El método más sencillo es utilizar emplasto de pimienta, pero puedes calentar la torta de cera aplicándola 1 o 2 veces hasta que se enfríe por completo.
La prevención de enfermedades
Para prevenir el desarrollo de la enfermedad o su reaparición después del tratamiento, es necesario prevenir la osteocondrosis de la columna cervical. Consiste en seguir unas sencillas recomendaciones:
- Duerma sobre una superficie plana y dura, es mejor comprar un colchón ortopédico especial y una almohada que se adapte a la forma de su cabeza.
- Para prevenir la enfermedad, controle su actividad física y no fuerce demasiado su columna. Si tienes que levantar pesas, hazlo suavemente y mantén la espalda recta.
- Si tu trabajo requiere que estés sentado por mucho tiempo, tómate descansos. Cada hora necesitas caminar o estirar los músculos rígidos con simples movimientos gimnásticos.
Para prevenir la osteocondrosis, es útil ir a nadar y colgarse de la barra horizontal durante 2-3 minutos todos los días.